No fue un error de diseño.
Primero debe recordar para qué fue diseñado el tanque. Su papel era avanzar por la tierra de nadie mientras era capaz de proteger a la infantería en avance.
En este escenario, tiene dos factores principales que se requieren para un tanque exitoso.
- El tanque debe poder cruzar cualquier terreno
- El tanque debe poder cruzar trincheras
Para el primer factor, este problema se resolvió con el uso de orugas. Las orugas Caterpillar se usan en tanques, ya que son capaces de repartir el peso del vehículo mucho mejor que las ruedas. La gran superficie de las pistas es lo que permite que esto suceda. Puedes ver esto en cada tanque del tanque Mark 1
A tanques modernos como el M1 Abrams
El uso de orugas de oruga generalmente resulta en la pérdida de movilidad en comparación con las ruedas, pero las ventajas de las orugas para tanques superan las desventajas.
Ahora, la razón por la cual los primeros tanques británicos tenían la icónica forma romboidal era para que pudieran cruzar trincheras.
Fueron hechos extremadamente largos intencionalmente y las huellas que rodeaban todo el cuerpo del tanque le permitieron sumergirse en la zanja y luego salir. Los británicos establecieron el requisito de poder limpiar una zanja de 3 metros de ancho, lo que explica la longitud del tanque.
También se debe tener en cuenta que debido al período de tiempo, no hubo suspensión que fuera lo suficientemente fuerte como para soportar el peso del tanque mientras era relativamente liviano. Su única opción era ir por las pistas alrededor de todo el cuerpo.
Para los tanques que no tenían el tamaño para hacer esto, se les proporcionó una ‘cola’ para ayudar a cruzar las trincheras.
Esa cola en la parte posterior del tanque esencialmente lo hizo más largo permitiéndole cruzar trincheras.
El diseño de los primeros tanques por parte de los británicos fue totalmente intencional y fueron adecuados para luchar en las trincheras de la Primera Guerra Mundial.