Hay partes de estar en las Fuerzas Especiales que son emocionantes y llenas de adrenalina, como saltar de aviones, saltar rápidamente de helicópteros, disparar todo tipo de armas en el planeta y ejecutar incursiones u otras misiones del mundo real. Hollywood te haría pensar que eso es todo lo que hacemos. El lema de las Fuerzas Especiales es “De Oppresso Liber”, que significa “Libera a los oprimidos”. La misión de las Fuerzas Especiales es ser un multiplicador de fuerzas para liberar a los aliados (o futuros aliados). La mayoría de las misiones de las Fuerzas Especiales implican trabajar con Guerrillas aliadas para ayudarlos a derrocar a un gobierno opresivo o trabajar con un ejército aliado para perseguir y matar a los insurgentes enemigos que amenazan la estabilidad de un gobierno aliado.
Las misiones de las Fuerzas Especiales son únicas, ya que siempre implica servir a dos clientes: Estados Unidos primero y, en segundo lugar, las personas a las que nos envían para liberar, entrenar o trabajar. Esta misión multidimensional requiere que la Boina Verde sea un “hombre renacentista”. Las boinas verdes hablan varios idiomas, estudian la cultura y entienden las costumbres religiosas y tribales de las personas con las que están asignadas para trabajar. Esto requiere que la Boina Verde estudie, absorba y se estire de una manera que el resto de los militares no.