La ropa se destruye ya que casi siempre se corta de los restos. Los efectos personales son asegurados, inventariados e inspeccionados para asegurar que nada que pueda ser vergonzoso o denigrante para el difunto o su familia sea enviado al NOK (pariente más cercano). Esta última tarea es delicada. ¿Le envías pruebas al cónyuge de un soldado de haber tenido una aventura extramatrimonial con otra? Respuesta: no. ¿Revistas o libros pornográficos? Respuesta: no (especialmente las que tienen fotos o fotos porno). Ese es el tipo de cosas que buscamos. La barra para lo que cae en esa categoría es bastante alta. Siempre revisé y revisé bien todo lo que era y por qué no se enviaba a casa antes de la destrucción, lo que luego creó un certificado de destrucción. Hay mucho sentido común en resolverlo, pero nunca fue una persona la que tomó la decisión en el vacío. Tratar con este tipo de cosas no es una tarea agradable, por decir lo menos. En general, no hubo problemas con los efectos personales, pero recuerdo vívidamente un caso en el que encontramos una foto desnuda, presumiblemente de una novia (él no estaba casado). Sus NOK eran sus padres. Destruimos la foto junto con su ropa interior y la ropa del uniforme que le habían cortado. Más tarde descubrí por un soldado que lo conocía bien que era su novia (quizás su prometido) y que estaba aterrorizada de que se lo hubiéramos enviado a sus padres. Le dije que le dijera discretamente que había sido encontrado y destruido.
El equipo se reutiliza si es reparable y se puede limpiar adecuadamente. Las armas siempre se limpian y reutilizan. Obviamente, todo lo que tenga sangre u otros restos en él o incrustado se destruye.