El Irán nuclear no es un problema serio para Estados Unidos, sino que empuja a Turquía y Arabia Saudita a las armas nucleares y a una mayor estabilidad MAD en la región y menos gastos de defensa para Estados Unidos, 6 billones en los últimos 15 años para la región. Pero hay problemas duales provenientes de Israel, quienes creen que las armas nucleares iraníes son el problema existencial. En primer lugar, la presión israelí en Washington no es algo que deba subestimarse. En segundo lugar, si Israel se involucra en una guerra, un Irán nuclear puede sentirse más seguro y estar más inclinado a cerrar el Estrecho de Khurmuz al tráfico, destruyendo el equilibrio global y la base del dólar estadounidense.
Por lo tanto, un acuerdo asegurado públicamente por la ONU reduce la presión israelí en Washington sobre las armas nucleares iraníes y minimiza un futuro corte iraní del flujo de hidrocarburos desde el Golfo Pérsico.