¿Por qué los aviones de pasajeros no pueden ser anfibios para que puedan aterrizar en el agua en una emergencia?

¿Te refieres a darles un casco, como los que se encuentran en los primeros barcos voladores? Podemos hacer eso, pero agregaría demasiada masa ya que la estructura tendría que ser extremadamente fuerte para absorber las fuerzas experimentadas durante el aterrizaje en el agua. Los motores de avión son muy confiables y la posibilidad de una zanja es bastante rara, por lo que es una pérdida de tiempo y dinero diseñar y fabricar algo que tiene muy pocas posibilidades de ser útil. El diseño del bote volador tampoco es muy aerodinámico. Estamos viviendo en un mundo muy apretado en estos días. Las aerolíneas y los fabricantes siempre están buscando formas de reducir el costo operativo de sus aviones.

Sin embargo, las aeronaves son flotables, al menos durante algún tiempo, dado que el aterrizaje fue suave y el mar o el cuerpo de agua están cooperando bien. En el aterrizaje de Hudson, el impacto en sí dañó la parte trasera del avión, lo que provocó que la sección de popa del avión se sumergiera en el agua. El avión fue derribado a una velocidad de descenso demasiado alta. Las aeronaves Airbus incluso tienen un interruptor de ‘descarga’ que cierra todas las válvulas de salida, tomas de aire del ariete y otras aberturas en la aeronave si se requiere un aterrizaje de agua.

Interruptor de abandono Airbus A330.

Gracias a los medios de comunicación, parece que las emergencias aéreas son frecuentes. Sin embargo, volar es increíblemente seguro, y especialmente en los aviones de reacción, un aterrizaje de agua o de emergencia es poco frecuente en el mejor de los casos. La ingeniería adicional para prepararse para una situación rara que ya es bastante sobrevivible no es factible debido al peso agregado y los cambios en la estructura de la aeronave. Además, es posible aterrizar aviones en el agua siempre que sea una superficie tranquila. Anas dio una gran respuesta, pero recuerda que los accidentes aéreos son RAROS. Es increíblemente seguro en un avión, por lo que, a menos que los aterrizajes en el agua ocurrieran con frecuencia, tal cambio de diseño rara vez sería necesario.